¿Lo has escuchado?
De ti, precisa Dios
Del otro, también
Pero de ti, precisa de ti
¿Para qué? No lo sé.
Sé que cuenta contigo
Más de lo que puedas imaginar.
Ah ¿qué no lo has imaginado?
Pues entonces..
¡Es el momento!
Para, detente
¡Háblale!
¡Pregúntale!
¡Escúchale!
Mira en ti.
No en el otro.
Revisa dentro de ti.
Difícil saber de qué precisa
Si no paras,
Si no observas,
Si no preguntas,
Si no escuchas,
Si no rezas
Si no callas
¡Detente!,
¡Mira!
¡vuelve!
Regresa renovado.
No imagines,
No sueñes,
Sea lo que sea
que precise Dios de ti
¡Siéntelo!
¡Vívelo!
¡Transmítelo!
¡Contágialo.!