Y Dios le dijo a Abrahám:
- ¡ Sal de tu tierra ¡
- ¡Deja la casa de tus padres!
- ¡ Ve a la tierra que te mostraré!
Y Abraham marchó, como le había dicho el Señor.
Y Dios nos dice a nosotros:
- ¡ Sal de tu tierra ¡
- ¡Deja la casa de tus padres!
- ¡ Ve a la tierra que te mostraré!
Y nosotros… Nosotros contestamos:
- ¿Salir? ¿y a donde iremos? ¿Por qué tengo que dejar mi tierra? ¿Cuándo volveré?
- ¿Andando o en coche? ¿Tiene que ser ahora? Tengo planes hasta agosto ¿No puede ser en otro momento?
- ¿Dejar la casa de mis padres? ¿Valerme por mi mismo? ¿Tendré que hacerme yo las cosas?
- ¿que vaya a una tierra desconocida? ¿No me la puedes mostrar ahora?. Me gusta planificar los viajes. ¿Cómo voy a emprender un camino sin saber la distancia, la dificultad del trayecto, la ropa que he de ponerme, …?. Necesito tenerlo todo controlado antes de partir.